Resulta impactante comprobar lo que sucede cuando los diseñadores de las grandes marcas dan rienda suelta a la creatividad. Nunca podremos saber en qué medida pueden haber sido influenciados por los diseños futuristas de hace 40 años atrás, publicados tanto en revistas como en el cine. Pero lo cierto es que aquí están.En este caso es un automóvil Peugeot del año 2003. Se puede apreciar un nuevo toque de audacia al jugar con las formas de manera tal que llegamos al punto de no diferenciar claramente el sector delantero del trasero. En las fotos ampliadas podrán descubrirlo más claramente.
Sin dudas es un paso más que aporta la casa francesa en el sentido del desarrollo de esta nueva generación de automóviles, que cada día va tomando más fuerza.
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